Un jurado popular declaró culpable al hijo de una ex jueza de Entre Ríos por el femicidio de su novia, Julieta Riera

El hijo de una ex jueza entrerriana fue hallado culpable por un jurado popular por el femicidio de su novia, Julieta Riera (24), quien el año pasado cayó de madrugada desde el 8° piso del departamento que la pareja compartía en el centro de la ciudad Paraná.

Ante el resultado condenatorio del jurado popular, el juez técnico Elvio Garzón decidió revocarle la prisión domiciliaria a Julián Christe (32), hijo de la ex jueza en lo Civil y Comercial de Paraná Ana María Stagnaro.

También el magistrado informó que será trasladado a una cárcel, donde cumplirá la pena que será impuesta en breve por el delito de homicidio triplemente agravado.

“Teniendo en cuenta que la pena única a aplicar es perpetua, voy a fijar la audiencia de cesura del juicio para hoy (jueves) a las 17.30″, señaló el juez Garzón.

Poco antes de conocerse el veredicto y luego de que el fiscal pidiera que sea declarado “culpable” y frente a los 12 jurados y al juez, Christe (32) afirmó: “Soy inocente. A Juli la amaba con el alma, y tengo la conciencia tranquila de que nunca le habría hecho daño”.

Luego de enumerar la evidencia obtenida, el representante del Ministerio Público Fiscal había pedido que se condene a Christe por el “homicidio agravado por el vínculo, por alevosía y por haber sido cometido por un hombre contra una mujer y por mediar violencia de género”.

Y el jurado popular le dio la derecha al fiscal y lo declaró culpable.

Julián Christe en una audiencia en los Tribunales de Paraná. Foto: agencia del día Villaguay

Christe había llegado al juicio con arresto domiciliario y estaba con prisión preventiva desde mayo del año pasado. Ahora, seguirá su vida en un penal.

El fiscal a cargo de la acusación, Ignacio Aramberry, había considerado durante su alegato que el joven fue autor del femicidio de Riera, remarcó que “es un violento de manual“, y que esa violencia “afectó directamente a Julieta”, ya que “iba en aumento progresivamente hasta que un día terminó matándola”.

Para Aramberry “no se puede preguntar si fue un accidente, porque quedó demostrado que es imposible” y aseguró que el acusado “manipuló psicológicamente” a Riera, a quien le “generó depresión, aislamiento y pérdida de individualidad” hasta que la “aisló y privó del mundo y la privó de la vida”.

Julieta Riera murió el 30 de abril en Paraná.

“En su vida diaria era un violento: rompía plantas, vidrios y monitores del edificio, generaba grescas, sufría lesiones por peleas, agredió a su ex pareja y también a Julieta”, dijo en referencia a Christe.

Además, el fiscal consideró que “esa violencia escaló fomentada por las drogas, el alcohol y los celos“.

“Quiso matarla con intención, la tiró desde un octavo piso e inconsciente, mientras él estaba lúcido y sabía lo que hacía”, manifestó el fiscal, quien destacó que tras ello se fugó sin llamar a emergencias, pidió ayuda a su madre, ex jueza, e intentó contactar a un abogado.

Las partes

La querellante, Corina Beisel, había pedido al jurado que “valore la prueba con perspectiva de género”, y que “no cometa el mismo error que en el caso de Lucía Pérez”, la joven asesinada en Mar del Plata, cuyo crimen sigue impune, para que “no haya más Julietas y el imputado no esté en la calle”.

La peatonal San Martín al 900, en Paraná.

El defensor de Christe, Franco Azziani Cánepa, solicitó que se declare inocente a su defendido y dijo que durante el juicio “no se explicó la mecánica del hecho ni el móvil“, por lo que terminó “con más dudas que certezas”.

Por su parte, el codefensor Ladislao Uzin Olleros calificó de “mamarrachesca y deficiente la investigación del Estado”.

El caso

Julieta tenía 24 años y era mamá de un chiquito. El 30 de abril del año pasado, su cuerpo cayó del balcón del departamento 5 del 8° piso del edificio de la calle San Martín 918, en Entre Ríos. Todo ocurrió entre las 2.20 y 2.50.

Según los forenses, se detectaron más de 31 lesiones, hematomas, hemorragias y excoriaciones en el rostro, cuello, brazos y piernas que “fueron anteriores a la caída“.

Julián Christe fue acusado del homicidio agravado de Julieta.

La pareja convivía desde hacía un año y medio, y más de 10 personas allegadas sabían que la relación estaba caracterizada por la violencia de género.