Pablo Iglesias deja el gobierno de Sánchez en España y busca la presidencia de Madrid: “Es imprescindible hacer frente a la derecha criminal”

“Es imprescindible hacer frente a la derecha criminal. En política hay que tener valentía para dar las batallas que hay que dar”, fueron las palabras con las que este lunes anunció su salida del gobierno de España Pablo Iglesias, vicepresidente segundo y líder de Unidas Podemos, en un videomensaje enviado a su militancia.

Iglesias sorprendió a los españoles con el anuncio que, según fuentes socialistas, ni el presidente Pedro Sánchez conocía de antemano: su salida del gobierno de coalición para presentarse como candidato a las elecciones del 4 de mayo en la Comunidad de Madrid.

“Madrid está en estos momentos ante un enorme riesgo. Es un riesgo para Madrid pero también para toda España y es que haya un gobierno de ultraderecha -dijo Iglesias en el video en el que se lo ve en camisa blanca y con el cabello recogido en un rodete, como lo usa últimamente-. Pero al mismo tiempo la historia nos brinda una oportunidad de que tengamos un gobierno de izquierdas en la Comunidad de Madrid.”

Madrid tendrá elecciones anticipadas, convocadas la semana pasada por su actual presidenta, Isabel Díaz Ayuso, quien apuró la medida para evitar las mociones de censura en su contra que se veía venir y como respuesta a la crisis de gobiernos de coalición regionales como el suyo -integrado por el Partido Popular, donde ella milita, y Ciudadanos- como ocurrió en Murcia, donde el escándalo de la vacunación contra el Covid-19 de funcionarios estalló, entre otros motivos, en una moción de censura contra su presidente.

El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias. Foto: EFE

“España está viviendo una transición. El bipartidismo no va a volver pero la democracia está amenazada por una derecha trumpista impulsada por enormes poderes económicos y mediáticos”, dijo quien será vicepresidente segundo de España hasta el 18 de abril, cuando comience la campaña electoral para las elecciones autonómicas madrileñas.

Una crisis para Sánchez

Iglesias desencadena así una crisis en la coalición de gobierno de Sánchez que este lunes ni siquiera está en España: viajó a Francia en una cumbre bilateral con Emmanuel Macron.

Tal vez aprovechando la lejanía del jefe del gobierno, Iglesias postuló además como sucesora para su vicepresidencia -que le correspondería a su partido, según el acuerdo programático de gobierno que firmó con Pedro Sánchez a principios del año pasado- a la actual ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, y hasta se atrevió a lanzarla como futura candidata a la presidencia de España.

“Yolanda Díaz es la mejor ministra de Trabajo de la historia de nuestro país -dijo Iglesias en su videomensaje-. Puede ser la próxima presidenta del gobierno de España.” “Hemos hablado esta mañana. Le he deseado suerte. En los próximos días tomaré las decisiones que debo tomar para facilitar el relevo”, dijo Pedro Sánchez desde Montauban, Francia.

El líder de Podemos se postula como candidato a presidente autonómico para rescatar a Madrid “de un gobierno de ultraderecha con Ayuso y con Vox (el partido a la derecha de la derecha que lidera Santiago Abascal)”.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Foto: EFE

La actual presidenta madrileña, que ya está perfilando su campaña para las elecciones del 4 de mayo, dijo este lunes: “Voy a cambiar el lema de campaña -que era ‘Socialismo o libertad’- y pasará a llamarse ‘Comunismo o libertad’”.

“España me debe una: que hemos sacado a Pablo Iglesias de la Moncloa -ironizó Isabel Díaz Ayuso-. Es una persona afín a independentistas, al entorno de ETA, y ha estado actuando siempre en contra de la Comunidad de Madrid y de todos los ciudadanos. Ha fomentado vivamente la expropiación, la ocupación, la intervención de la empresa.”

En su videomensaje, Iglesias anticipó su estrategia para ganar las elecciones en Madrid: “Voy a proponer a los compañeros de Más Madrid -el partido que se desprendió de Podemos en las últimas elecciones generales- que hagamos una candidatura única”, dijo.

Pablo Iglesias suele conducir su carrera política a alta velocidad y con curvas pronunciadas: después de haber ganado las elecciones de abril de 2019 sin la mayoría necesaria para poder gobernar solo, el socialdemócrata Pedro Sánchez llegó a ofrecerle una vicepresidencia y tres ministerios a cambio de su apoyo para investirlo presidente, siempre y cuando el mismo Pablo Iglesias no fuera parte del gabinete. “Yo sería un presidente del gobierno que no dormiría por la noche”, dijo Sánchez.

Pero Iglesias se plantó y la falta de acuerdo entre el PSOE y Podemos desembocó, en noviembre de ese año, en una repetición electoral que volvió a ganar el socialismo pero que, otra vez sin alternativas, terminó cediendo a incorporar a Iglesias, a su pareja -Irene Montero, actual ministra de Igualdad- y otros cuadros de Podemos al Consejo de Ministros de La Moncloa.

Pero la convivencia del matrimonio forzoso en la coalición de gobierno mostró más de una vez la hilacha: Iglesias ataca sin pudor a la Casa Real y propone un referéndum para votar por la república, pone en duda la calidad democrática de España por la situación de los políticos independentistas presos en Cataluña y no está de acuerdo con los socialistas en políticas económicas como la regulación de los alquileres.

Un año y dos meses después de haber puesto un pie en el gobierno de España, Pablo Iglesias se baja de la foto oficial para intentar otra conquista: Madrid, el terreno donde, con el pelo más largo, fundó su partido hace poco más de siete años.