Que difícil se hace poder concretar una crónica cuando se trata de tus amores, amores que se mimetizan entre la alegría de la familia y el dolor de los ausentes, pido perdón si se me escapa un lagrimón de puro soldado que soy. Este 26 de diciembre asistimos a un acto cargado de emotividad, no solo por lo que significa el relato en sí, haber compartido en los treinta años de servicio de distintos hechos que marcan a fuego la pasión, el amor a nuestra institución es algo inexplicable. El cambio de Jefe del querido y glorioso Regimiento de Infantería de Montaña Dieciséis es sin lugar a dudas un hecho de por si emocionante. Ser parte de los sueños de la familia, pues quien resulta nuevo Jefe es nada más y nada menos que el hijo de un camarada tras haber pasado todos los años de su carrera en esta Unidad , de formación y personalidad sin igual, hermano de mi esposa, percibir las emociones encontradas es para destacar.
El Teniente Coronel José Mauricio Montaña, es nativo de este Valle encantado que día a día a través de su gente busca el crecimiento en todos los sentidos
La previa de un día para recordar
Como es habitual en toda actividad militar del glorioso 16, la plaza de armas , de la unidad decana de las tropas de Montaña, dio inicio a la ceremonia, la presencia de muchos oficiales y suboficiales, gran parte de ellos en situación de retiro, otros cumpliendo un rol importante en cada unidad de la gran unidad de combate de las tropas de Montaña, le dieron marco a este cambio de Jefe del elemento, los apuestos integrantes de la unidad esperaban, bajo el sol característico de este Valle, que acariciaba los rostros curtidos de cada uno de ellos, la banda militar con su histórico uniforme le daba un toque de distinción al momento, seguido de la Bandera de Guerra que tiene algunas medallas, a su vez la bandera histórica de la unidad, el estandarte fueron quienes dieron paso a cada soldado, los que con paciencia esperaron el momento del inicio, luego los montados, los que con fieles mulares cerraron esta parada militar hasta ese momento.
La ceremonia.
El Jefe saliente Teniente Coronel Guillermo Perez Marigñac , presentó los efectivos al reciente Comandante de la octava brigada de Montaña, la que hacía pocos días había recibido la gran responsabilidad de ser quien ejercerá el comando de la gran unidad de combate se trata del Coronel Mayor Gonzalo Rodriguez Espada quien venía acompañado del Jefe entrante Teniente Coronel José Mauricio Montaña. La revista de las tropas del Comandante en compañía de ambos jefes, saliente y entrante. Todo comenzó allí cuando el Comandante de brigada, saludo con una voz, que me recordó a los jefes que he tenido en mis treinta años de servicio. Esa voz que tiene y hace sentir la autoridad, la que llega con el fuerte compromiso, que solo los que estamos convencidos que nuestra institución nació en mayo con la patria misma, más los que en muchas oportunidades le hicimos frente al frio en las mañanas a veces con temperaturas bajo cero. Revivir esos momentos hace que el corazón late a mayor velocidad.
Luego del himno nacional argentino, emotivo para mí, no voy a opinar más pues quiero centrarme en el momento de los acontecimientos más fuertes y a ello voy.
Las lecturas del resumen de las fojas de servicio dieron el inicio a la actividad que se venía. El encargado de la Unidad cumplió con la tradicional entrega al Jefe saliente de la banderola que lo acompaño durante el tiempo que estuvo el Teniente Coronel Guillermo Martin Perez Marigñac en el comando de la unidad, pueden haber cambiado los tiempos, algo me perdí en ese momento. Pero la emoción seguía presente en los que ya en situación de retiro participamos del acto y lo seguíamos paso a paso.
Lectura de la designación del nuevo Jefe por parte de la Superioridad a cago del ayudante del Jefe saliente.
Todo esto seguido muy de cerca por los familiares y amigos del que en minutos más seria puesto en funciones por el Comandante de la octava brigada de Montaña.
Los momentos emotivos
Se vivieron en cada paso de este acto de la puesta en posesión del Jefe de la Primera Unidad de Combate de las tropas de Montaña, rescatar algunos se nos ocurre en estos momentos.
En la puesta en posesión por parte del Comandante de la brigada, y la respuesta al SI JURO, marco el aplauso de ex jefes presentes, algunos amigos especialmente sus familiares que en gran número se acercaron para dar su apoyo , destacar la presencia de los camaradas, su señora madre, primos , sobrinos , hermana , esposa e hijos. Se pudo apreciar en los rostros la satisfacción por el logro obtenido en su trayectoria militar.
Sin temor a equivocarnos la participación de la Banda Militar BATALLA DE CHACABUCO, fue un momento aplaudido, no solo en el desfile sino también en su marcial desplazamiento.
El pasaje de las tropas, los que con la energía que caracteriza a los uniformados con su jefe al mando marcaron el porqué se los llama Primera Unidad de Las tropas de Montaña.
Finalizado el desfile y luego de disfrutar de los acordes y movimientos de la Banda militar, ambos jefes recibieron el saludo de los presentes, lugar especial es que cada uno de ellos se llevaron la foto con el Jefe de la Unidad.
Posteriormente se llevó a cabo un ágape en el comedor de tropas de la Unidad, el tradicional Corte de la torta, que llevaron a cabo el Jefe saliente y entrante,
Al finalizar la despedida del hasta hace algunas horas ejercía el comando de la Unidad, los efectivos formados en un cordón acompañaron con aplausos al Teniente Coronel GUILLERMO PEREZ MARIGÑAC, siempre a los sones de la banda militar de la Guarnición Militar Uspallata.
Por: Suboficial Principal R MIGUEL ANGEL PELAYTAY (Director LRN 919)