También vinculó la evolución del tipo de cambio con el proceso de remonetización. “La Argentina tiene un potencial enorme de remonetización”, afirmó. A su juicio, si el país logra converger a tasas de inflación internacionales, la preferencia por mantener pesos en circulación aumentará. “Esa remonetización hace que el tipo de cambio tenga que caer”, sostuvo.
Advirtió, sin embargo, que ese camino requiere una transición ordenada. “El tipo de cambio tiene que ir rápidamente al piso de la banda para volver a monetizar”, explicó. Y alertó que si la economía no logra absorber esa transición de forma progresiva, podrían registrarse consecuencias. “Está el riesgo de que haya empresas que vayan a la quiebra, por eso hay que remonetizar la economía sin emitir dinero”, planteó.
Milei defendió el esquema de tipo de cambio actual. Afirmó que el mercado cambiario fue liberalizado y que no se registraron movimientos abruptos. “Liberamos el mercado de cambios y el tipo de cambio no subió”, indicó. Cuestionó a quienes sostienen que existe un atraso en la cotización oficial. “El tipo de cambio es libre y siguen hablando de atraso cambiario. A mí se me caería la cara de vergüenza. Son patéticos”, dijo. También rechazó que la existencia de bandas limite la libertad de precios: “Dicen que no es a precio de mercado porque hay bandas”.
En relación con la inflación, Milei reiteró que se trata de un fenómeno monetario. Afirmó que, con la base monetaria controlada, el alza de precios no se sostiene. “Si un precio sube, otro tiene que caer”, indicó. Remarcó que el Gobierno explicó públicamente por qué una suba del tipo de cambio no debía generar más inflación. “Hubo una cadena nacional y anuncios de Caputo y Bausili para explicar que el tipo de cambio no tenía por qué saltar y, si lo hacía, no tenía que generar inflación”, señaló.
Para Milei, las políticas de control de capitales y de persecución sobre el uso del dólar contribuyeron a consolidar una cultura económica regresiva. “Durante 90 años, los argentinos creyeron que si subía el tipo de cambio, subían los precios. Eso está mal”, aseguró. Concluyó que el desafío es demostrar que ese vínculo no es automático. “Nosotros tenemos que mostrarle a la gente cómo funciona esto”, afirmó.