Puertas adentro, todos recuerdan que en 2015, cuando River ganó su tercera Copa Libertadores luego de 19 años, la estructura granítica del equipo fue clave para llegar al Mundial de Clubes de Japón, donde perdió la final 3 a 0 ante el Barcelona de Messi, Neymar y Luis Suárez. A partir de los octavos de final de aquella Libertadores, River convirtió diez goles en ocho presentaciones y recibió apenas dos. El desafío, ante Racing, comenzará por seguir manteniendo el cero en el arco propio frente a un ataque temible como el que comandarán Ricardo Centurión, Gustavo Bou y Lisandro López.