La Unión Cívica Radical (UCR) suspendió este lunes a los cuatro diputados que acompañaron el veto del presidente Javier Milei a la reforma jubilatoria, que incluía un aumento adicional de haberes, votado por el Congreso. El proyecto había sido presentado por el radicalismo.
Mariano Campero, Martín Arjol, Luis Picat, Pablo Cervi fueron los legisladores sancionados y apartados del bloque radical hasta que el Tribunal de Ética del partido defina su situación. Lo que se evalúa es el cambio en el sentido del voto luego de una reunión que mantuvieron con el Presidente horas antes de la sesión en la Cámara de Diputados. También analizará la conducta de Roxana Reyes y Gerardo Cipollini, los diputados radicales que se ausentaron de la votación.
José Tournier es el quinto de los legisladores radicales que participó de la reunión con Milei, pero aunque forma parte del bloque, no está afiliado a la UCR, por lo que no fue alcanzado por la misma sanción.
“No son dueños del partido. No tienen derecho a expulsar a diputados votados por los ciudadanos en la boleta Bullrich-Petri. Los que hoy piden expulsiones quieren volver al país que dejó el kirchnerismo. El ministro de ‘la 125′ quiere una Argentina kirchnerista. No retrocedamos 20 años”, escribió Cantero en su cuenta de X, en referencia al senador Martín Lousteau.
El gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, también cuestionó lo resuelto por el Consejo Nacional partidario. “La política de mayorías populares no es para sectas, ni se hace con purgas. La UCR no es una agrupación universitaria, es un partido nacional. Esta decisión está mal. Le pido a las autoridades del partido que asuman la tarea de conducir, no que sean la voz de una facción”, escribió.
La investigación se encuadra en el artículo 53 de la carta orgánica partidaria, que faculta la mesa directiva de la Convención Nacional a “denunciar ante el Tribunal Nacional de Ética las faltas en la conducta de los afiliados y dirigentes partidarios de todos los distritos cuando, por su investidura, lesionen la dignidad del partido” y también “a suspender preventivamente al afiliado en circunstancias graves”, quedando en manos del Tribunal la decisión final.
Tras la reunión de la mesa directiva, la Convención Nacional de la UCR publicó un comunicado en el que explicó que la decisión se tomó “luego de un extenso debate, en el cual se analizaron las circunstancias de hecho y de derecho que rodean este caso”.
También indicó que resolvió elevar la denuncia al Tribunal de Ética del partido, para que analice la conducta de los diputados Picat, Campero, Cervi, Arjol, Reyes y Cipollini, afiliados a la UCR.
Además, suspendió “preventivamente” a Picat, Campero, Cervi y Arjol como afilados, hasta que el Tribunal Ética juzgue su conducta de manera definitiva, que podrá ser apelada ante la primera reunión del plenario de esta Convención Nacional.
En la reunión se resolvió también instruir al presidente del Comité Nacional y a los presidentes de bloque de ambas Cámaras, para que junto con las demás autoridades partidarias y los gobernadores de la UCR, creen una mesa de diálogo que busque “unificar criterios en el accionar legislativo y así evitar situaciones” como las que sucedieron estos días.
La victoria del oficialismo en el Congreso, donde logró sostener el veto a la reforma jubilatoria gracias al voto de bloque aliados y de cinco diputados radicales, generó una fuerte polémica en la política nacional, pero en especial en la UCR, donde un sector busca expulsarlos.
En ese contexto, este lunes se realizó una reunión virtual de urgencia convocada por la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical, que preside Gastón Manes.
“Es un punto de inflexión en la historia reciente del radicalismo. Quedó claro que a partir de ahora hay que cambiar la forma de conducirnos, porque con esta laxitud, que viene desde los tiempos de Juntos por el Cambio, el radicalismo fue perdiendo protagonismo”, afirmó Manes este sábado, en declaraciones a CNN Radio. Y remarcó: “La Unión Cívica Radical tiene una definición y no vamos a dejar pasar este mamarracho político de estos dirigentes”.
Los dichos del presidente de la Convención fueron anticipatorios de lo que terminó sucediendo este lunes, con la decisión de la suspensión y la intervención del Tribunal de Ética.
Tras la decisión de la Convención Nacional de la UCR, Campero hizo si descargo a través de su cuenta de la red social X. “Ante este jaque, ratifico que pocas veces en mi vida actué con tanta convicción, como cuando decidí blindar el equilibrio fiscal de este Gobierno. La defensa de las instituciones es dejar gobernar”, escribió.
Tras cuestionar que “a Alfonsín, a De la Rúa y a Macri no los dejaron gobernar”, remarcó que “con Alberto Fernández, que tuvo el peor índice de jubilaciones de los últimos 20 años, ningún kirchnerista dijo nada. Ningún kirchnerista”.
“Y no estoy hablando solamente de los peronistas. También hay radicales kirchneristas. En Tucumán, jugué el ballotage con Milei. El 80% del radicalismo jugó con Massa. ¡Públicamente, el radicalismo jugó con Massa!”, explicó.
