Las polémicas declaraciones que realizó este miércoles el médico y fundador de la Fundación CONIN, Abel Albino, sobre los preservativos y el SIDA, devinieron en otros cuestionamientos. Colectivos de género, de diversidad sexual, de organizaciones sociales y hasta asociaciones profesionales, criticaron los millones de pesos que recibe de asistencia estatal.
El pediatra preside una entidad sin fines de lucro que trabaja en la prevención de la desnutrición infantil. Dicha institución tiene varios convenios millonarios con distintas jurisdicciones del país, incluso con ministerios nacionales, y las aseveraciones de Albino poniendo en duda la eficacia de este método anticonceptivo, que salva miles de vidas en el mundo a diario, despertaron la indignación de estas organizaciones que salieron a reclamar la rescisión de los contratos.
La médica Mabel Bianco, titular de la Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM), fue una de la profesionales que pidió que el Estado deje de financiarlo. “La conducta (de Albino) fue irresponsable y es un mal ejemplo, que encima lo financia el Estado nacional. Tiene programa de subsidios del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación y de otras provincias”, explicó.
Bianco reveló que su fundación también recibe ayuda económica, en este caso del Ministerio de Salud, y con esos fondos compra preservativos y lleva adelante talleres de apoyo a jóvenes. “Mientras nosotros realizamos esta tarea, por otro lado financiamos a un señor que da este mensaje. Esto se tiene que acabar. Que él piense lo que quiera, pero el Estado no lo puede seguir financiando”, sentenció.
En el marco del Plan Nacional de Primera Infancia –que tiene que ver con la prevención y el abordaje de la desnutrición infantil– la Fundación CONIN viene recibiendo fondos del Estado desde 2016 para realizar actividades orientadas al desarrollo saludable de los niños.
Pero esta no es la primera vez que se cuestionan los fondos que recibe Albino. Durante el informe que el jefe de Gabinete de Ministros, Marcos Peña, brindó en marzo de este año, debió responder sobre los convenios celebrados entre la Fundación CONIN y los ministerios de Desarrollo Social, de Salud, de Educación y con la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia.
Según contestó Peña en esa oportunidad, “el convenio marco firmado entre el MEN y la Fundación CONIN busca mejorar las condiciones de educabilidad de alumnos de nivel inicial de 3 a 5 años, con el objetivo de garantizar una mejora en sus trayectorias escolares y la detección temprana de la desnutrición“.
Para ese fin –agregó Peña– se vienen realizando actividades de cooperación institucional y de asistencia técnica en distintas jurisdicciones del país con el propósito de instalar el tema y asistir a los niños generando las condiciones necesarias para que el aprendizaje se produzca satisfactoriamente. “La desnutrición y malnutrición traen aparejados problemas de aprendizaje que pueden desembocar en el fracaso de las trayectorias escolares“, respondió Peña en ese momento. Además, informó que a ese día se habían fortalecido 82 centros para prevención de la desnutrición infantil en todo el país.
En este marco, Peña detalló que en el primer año se le transfirieron a la entidad que preside Albino un total de 9.520.720 pesos. En 2017, otros 52.656.187,80 de pesos. Y en lo que va del 2018 –a mediados de marzo–, unos 14.861.885,74 de pesos. Asimismo, el jefe de Gabinete comunicó que el estimado para todo el presente año será de 121.288.683 pesos.
Finalmente, el jefe de Gabinete mencionó otros $17.586.370(se ejecutaron 11.434.185 pesos) que recibió Albino por el acuerdo entre la Dirección de Registro y Acreditación de los Centros de desarrollo Infantil y CONIN.
Así, la Fundación de Albino recibió del Estado casi $90 millones en poco más de dos años. Cuando este medio intentó contactarse con las autoridades de la Fundación, no tuvo éxito.