La Cámara Electoral decidirá qué periodistas conducen el debate presidencial ante la falta de acuerdo de los candidatos

Los representantes de los aspirantes a la Casa Rosada se vienen reuniendo semanalmente desde principios de septiembre en la sede del máximo tribunal electoral, en “un clima armónico”, según coincidieron los consultados. Pero no hubo acuerdo sobre tres aspectos. El más sensible es quiénes serán los periodistas que actuarán de moderadores. Los otros dos son si se les permitirá tener un papel en el atril como ayuda memoria o para escribir, y la modalidad de la interacción entre los candidatos después de la exposición de cada tema.

El presidente Mauricio Macri (Juntos por el Cambio), Alberto Fernández (Frente de Todos), Roberto Lavagna (Consenso Federal), Nicolás Del Caño (FIT), José Luis Espert (Unite por la Libertad y la Dignidad) y Juan José Gómez Centurión (Frente NOS) se verán las caras, por primera vez todos juntos, los domingos 13 y 20 de octubre, las fechas fijadas por la Cámara para los dos debates presidenciales que, por primera vez, son obligatorios por ley. La primera cita será en la Universidad del Litoral en la ciudad de Santa Fe y la segunda, en la Facultad de Derecho de la UBA en la ciudad de Buenos Aires. Ambos encuentros serán televisados en directo, a las 21, por la Televisión Pública, con señal abierta para que pueda ser tomadas por el resto de los canales.

El plazo máximo para que los jueces Santiago Corcuera y Alberto Dalla Vía resuelvan es el jueves a primera hora, ya que a las 10.30 están convocados los equipos de campaña para firmar el Reglamento de los debates. La mayoría de los aspectos de la organización y la dinámica que tendrán los dos eventos fueron consensuados entre los representantes de los candidatos, en base a las propuestas realizadas por un Consejo Asesor designado por la Cámara e integrado por miembros de la sociedad civil y del mundo académico.

El “debate” sobre los moderadores

Pero los apoderados partidarios e integrantes de los equipos de comunicación de los candidatos no pudieron ponerse en quiénes serán los periodistas que moderarán el debate, pese al rol acotado, y casi formal, que tendrán: anunciar los temas pautados y dar o quitar la palabra, con corte del audio del micrófono cuando se acabe el tiempo reglamentario.

Tampoco coincidieron sobre los criterios para elegirlos. Las posturas variaban entre privilegiar la experiencia televisiva, el manejo del “vivo”, el conocimiento de la agenda política, su “neutralidad” política, o su grado de “popularidad”, para lograr una mayor audiencia en el prime time televisivo. También hubo planteos de que se debería tener en cuenta el federalismo e incluir a algún periodista del interior.

Con la igualdad de género como tema central en la sociedad hoy, solo hubo coincidencia en que sean un hombre y una mujer. Pero aún no está definido si será una misma pareja por debate, dos en cada encuentro -que intervendrán en dos bloques cada una-, o incluso tres distintas cada fecha.

Para salir del dilema de que los periodistas elegidos fueran asociados a los “pedidos” de los equipos de campaña de uno u otro candidato, en la reunión que tuvieron los representantes de los candidatos ayer a la tarde se resolvió que escribieran en un papelito, en forma anónima, entre dos y seis parejas de periodistas que proponían para conducir el debate. “Estamos todos presionados porque recibimos muchos llamados de periodistas que nos piden que propongamos su nombre” admitió uno de los participantes que estuvo ayer en la Cámara Electoral ante Infobae.

Así surgieron los nombres de 20 periodistas, que se manejaron con extremo hermetismo para evitar filtraciones y “darle absoluta libertad a la Cámara para elegir, sin buscar imponer o descartar nombres por anticipado”, según comentó una fuente al tanto de los pormenores de este delicado tema.

Según pudo saber este medio, el 90% de esta lista sugerida por los equipos de los candidatos son de la Ciudad de Buenos Aires, todos con experiencia televisiva y un alto grado de conocimiento público. La más votada fue una periodista mujer, que reunió tres votos; otros cuatro periodistas hombres obtuvieron dos votos cada uno; y la docena restante, un voto cada uno.

A esta lista, se suman las propuestas de parejas de conductores que le hicieron llegar los canales de aire -con los nombres de sus figuras más emblemáticas de los noticieros-, y los propios periodistas -muchos de ellos de medios del interior- que se contactaron con la Cámara Electoral para manifestar su interés de actuar como moderadores.

En total, los camaristas deberán elegir entre unos 40 nombres de profesionales del periodismo televisivo, a las parejas que moderarán los debates para los dos debates antes del 27 de octubre, así como para un eventual tercer debate si hay balotaje.

También deberán definir si habrá dos, tres o cuatro parejas por debate, o sea, si deberán elegir seis, doce o 18 nombres de periodistas.

Cómo será la “interacción”

La estructura de cada debate, tal como anticipó Infobae, será de un bloque de entre 45” y 1’ de apertura, para la presentación de cada candidato, en el que se acordó que ningún candidato podrá interpelar a otro.

Luego habrá dos bloques con dos grandes temas ya fijados en cada uno, sobre los que cada candidato podrá exponer dos minutos. Al finalizar cada bloque temático, habrá 30″ y 30″ para una suerte de “intercambio” acotado, cuya modalidad deberá terminar de definir la Cámara Electoral para mañana, ya que no hubo unanimidad entre los equipos de campaña.

La idea que prevaleció es que en esos dos segmentos de 30” los candidatos puedan dirigirse a otro, hacer una referencia a un contrincante, hacerle una pregunta, o si así lo desean, responder o rebatir lo que dijo alguno de los participantes. No prosperó el pedido de la Izquierda de que fuera una instancia de pregunta de un candidato a otro, con la obligación de que éste responda.

Los temas ya fijados para el primer debate son: economía y finanzas; educación y salud; derechos humanos, género y diversidad; y relaciones internacionales. Los del segundo: empleo, producción e infraestructura; federalismo, calidad institucional y rol del Estado; desarrollo social ambiente y vivienda; y seguridad.

Al cierre del segundo encuentro en Buenos Aires, los aspirantes a la Casa Rosada tendrán otro minuto de cierre, también libre, en el que podrán decir lo que quieran, sin una pregunta disparadora.

El orden de los temas, de intervención, de ingreso al escenario, así como quién comienza el debate y quién lo cierra, se sorteará mañana jueves a las 12.30 en un acto público en la Cámara Electoral, con presencia de la prensa. Se garantizará que todos sean el primero y el último en, al menos, un bloque.

Papeles sí o no

El otro tema sobre el que tendrán que resolver los camaristas antes de sentarse a firmar el Reglamento de los debates con los representantes de los candidatos es si se les permitirá tener algún tipo de papel en el atril, o no podrán tener nada. En caso de que resuelvan que sí, deberán decidir si es solo una hoja en blanco y una lapicera, donde anotar referencias a lo que diga otro candidato, o si podrá ser un apunte ayuda memoria.

Lo que ya saben los candidatos al día de hoy es que no podrán contar con algún tipo de apoyatura visual o fotográfica para mostrar desde el atril, ni ayuda externa electrónica a través de celular, tablet o computadora.

Texto de apoyo a la gobernabilidad

Lo último que tendrá que tener el visto final de la Cámara es el texto de una declaración conjunta de apoyo a la gobernabilidad y la institucionalidad, que ayer se sometió a consideración del resto de los equipos para ver si había consenso en que fuera firmado por todos. La versión final se conocerá mañana, así como la voluntad para que sea suscripto por la totalidad de los aspirantes a presidente.