Sigue intacto Ángel Di María. Porque a sus 36 años y ante un rival de amigos y ex compañeros suyos, jugó un partidazo. Arrancó por derecha, pero por ratos apareció sobre la izquierda, y en ambas bandas desequilibró con su especialidad: el 1vs1. Buscó su gol, hasta que le llegó a través de un penal vía VAR, su aporte a la paliza 4-0 del Benfica (Nicolás Otamendi capitán y titular) al Atlético de Madrid de Nahuel Molina, Rodrigo De Paul, Ángel Correa, Julián Álvarez y Giuliano Simeone (tuvieron minutos todos, salvo Juan Musso) este miércoles.