Los créditos hipotecarios en UVA surgieron hace más de tres años, como una opción que permitió a más familias acceder a su vivienda propia porque requería de ingresos más bajos que un crédito tradicional. Pero en 2018, los deudores de esos nuevos créditos se vieron afectados por la indexación de las cuotas al ritmo de la inflación.
Según un análisis realizado por el especialista en finanzas Christian Buteler, por un crédito hipotecario UVA de $1 millón por 240 meses, la cuota pasó de $7.915 en marzo de 2016 a $20.887 en junio de 2019. El capital adeudado, en tanto, alcanzó los $2,4 millones.