El ex técnico de la Reserva del Xeneize apeló a sus redes sociales para despedirse de sus jugadores y empleados del club, pero también para sentar su posición ante la decisión de la nueva dirigencia
Ya en su rol como vicepresidente segundo de Boca y a cargo del fútbol profesional y amateur, Juan Román Riquelme tomó una fuerte decisión: removió a todos los entrenadores de las divisiones inferiores, a Oscar Regenhardt, coordinador de la cantera, y a Rolando Schiavi, su ex compañero y director técnico de la Reserva. Fue Raúl Cascini, ex panelista y parte de su equipo de trabajo, quien se encargó de comunicar la determinación telefónicamente, con el mensaje de que “no forman parte del nuevo proyecto”.
Pues bien, el Flaco, quien se encontraba en Europa al momento de recibir la noticia (viajó a una capacitación junto al resto de los formadores que había sido pautada por Nicolás Burdisso, secretario técnico hoy con futuro difuso) realizó un duro descargo a través de su cuenta de Twitter, en el que, además de agradecer a sus futbolistas y a quienes trabajaron junto con él, criticó el contexto del despido y los modos de transmisión. “No fue una decisión comunicada ni argumentada por quienes la resolvieron, pero la respeto”, escribió, apuntando hacia Riquelme, quien no fue el encargado de hablar cara a cara con los técnicos salientes.
“Entiendo bien que puede haber diferencias de criterio deportivo en cada gestión, pero considero que los proyectos, para que sean exitosos, deben respetarse de manera integral”, fue otro tramo en el que Schiavi tomó distancia de la decisión. El Flaco asumió como entrenador de la Reserva de Boca en febrero de 2015, luego de colgar los botines tras un paso por el fútbol chino y una breve escala en Rivadavia de Lincoln, el club de su ciudad. El preliminar del Xenize se ubica en la quinta posición del torneo preliminar, con 27 puntos, producto de siete victorias, seis empates y tres derrotas; a cinco unidades del líder Estudiantes.