Agis también salió a respaldar el tipo de cambio actual. “Este tipo de cambio real sobra, este tipo de cambio real de equilibrio y la cosa se tiene que quedar acá porque para arriba es inestable. Para arriba vamos a transformar un problema de liquidez en un problema de solvencia y eso solo lo hacen los estúpidos. Cuando vos no podés pagar la tarjeta y fundís tiene que venir un amigo y decirte “no pará, pagala con la cuenta corriente”. Lo que tenemos que lograr es que todos entiendan que para la política este tipo de cambio está bien”, sostuvo y luego agregó, parafraseando a Keynes, “este tipo de cambio sobra siempre y cuando los políticos no permanezcan irracionales por más tiempo del que todos podemos permanecer solventes”.

Para justificar que este es un tipo de cambio de equilibrio, Caputo subrayó las diferencias con el proceso de dolarización que se dio el año pasado. “Hay que mirar también en qué etapa del proceso de dolarización está el mercado. Esto es crucial. No es lo mismo un problema como teníamos en mayo o junio, donde había un exceso de demanda de 1500 millones de dólares por día, al problema que enfrenta hoy el Central, que es un problema de oferta. Cuando pasan este tipo de problemas el mercado se reprime y nadie vende”, indicó.

Agis también coincidió en este punto con Caputo, lo que ayudó a llevar tranquilidad a la platea. “A mí me parece que un buen compromiso para tratar de articular es decir defendamos 60 pesos, pero no nos compremos 52 ni 45 pesos. 45 pesos no nos podemos comprar nunca más. No nos compremos retrasar. Ni vos ahora ni yo en el futuro. Lo dijo Alberto el miércoles. Dijo que lo que está haciendo el Banco Central me parece razonable porque al final del día está cuidando las reservas. Está vendiendo en diagonal. No puso el famoso muro y se le llevaron el muro. Si el Banco Central está cuidando las reservas, le está cuidando las reservas al próximo presidente porque el incentivo es el inverso. El incentivo es dejarlo sin reservas. A mí me parece que este tipo de cambio sobra si la política entra en razones. Si la política no entra en razones, no sobra y no sé a dónde vamos”, completó.