Las temperaturas de 2019 fueron 0,6º superiores a las promedio del periodo 1981-2010.
“Es innegable que se trata de señales alarmantes“, subrayó Jean-Noël Thépaut, director del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Medio Plazo, del que depende Copernicus.
Debido a las emisiones de gases de efecto invernadero generadas por la actividad humana, el planeta ya registró un alza de al menos 1º respecto a la era preindustrial, con efectos devastadores.
Conforme a las previsiones de los meteorólogos, 2019 registró numerosos fenómenos extremos.
En Australia, los incendios en curso hallaron un terreno idóneo para propagarse debido a la sequía y a unas temperaturas excepcionales. Unos 80.000 kilómetros cuadrados se esfumaron con las llamas, una superficie equivalente a la de la isla de Irlanda.