El indicador de la banca JP Morgan, que mide el diferencial de la tasa de los bonos de EEUU a 10 años (ahora en 2,6% anual) y sus similares emergentes, cede 27 unidades o 3,6% para la Argentina, a 714 puntos básicos. Esta sobretasa continúa en un rango máximo desde 2015, y prácticamente duplica las cifras de comienzos de 2018. La baja es positiva, pero la realidad es que con este nivel de rendimientos, la Argentina queda expulsada de los mercados de capitales internacionales.