En un principio se había especulado con que el jefe de Estado recorrería algunos metros de la Plaza de Mayo. Pero solo se limitó a visitar uno de los camiones en los que se tramitan los documentos y que estarán en algunos de los principales puntos del país, y saludó a los empleados y promotores del Ministerio del Interior, vestidos con ropa celeste.
Después, el mandatario y el ministro del Interior se acercaron a la multitud que los esperaba detrás de las vallas dispuestas para la ocasión: hubo besos y saludos y cánticos en favor del jefe de Estado y del funcionario de La Cámpora. Una colaboradora de Presidencia recogió algunas cartas de los presentes.
Fernández había estado toda la mañana con reuniones en la quinta de Olivos. Recién llegó sobre el mediodía, para el lanzamiento de la campaña de documentación, un evento que estaba previsto para las 11 de la mañana pero que se retrasó por más de una hora. El Presidente llegó, saludó con una amplia sonrisa, se metió en el camión dispuesto frente a la Casa Rosada y se sacó fotos con todos los empleados, que cantaron por él. Después volvió a su despacho, donde tenía previsto almorzar, antes de la reunión de las 4 de la tarde con empresarios y sindicalistas.
El programa había sido inaugurado en la última gestión de la ex presidenta por parte del ex ministro Florencio Randazzo, que ya había sacado en aquella oportunidad las camionetas ploteadas de azul a la Plaza de Mayo para el lanzamiento de la iniciativa.